viernes, 9 de noviembre de 2012

Cine para sordos y ciegos


Aquí os dejamos esta noticia de que por fin hay cines para todos.

En Estados Unidos hay cadenas de salas de cine preparadas para discapacitados visuales y auditivos; en Gran Bretaña, hay unas 400 salas; en España, dos. La primera se inauguró hace un mes en Pamplona, la segunda arranca esta semana en Valencia en los cines Lys.

A primera vista, la sala adaptada tan sólo se diferencia de las convencionales porque debajo de la pantalla hay otra horizontal, más pequeña, donde se proyectan los subtítulos para las personas con problemas auditivos. Hay unos bucles magnéticos que mejoran la ampliación del sonido, y para las personas con problemas visuales, el utensilio básico en la sala es el audiodescriptor que relata lo que acontece en la pantalla, enriqueciendo las descripciones con claves de interpretación e información adicional.

Esto nos a parecido una noticia que augura un futuro donde los discapacitados están más integrados en la sociedad, ya que todo el mundo tiene derecho a disfrutar del buen cine, y de poder ir a un estreno sin problemas. Que tengan en mente abrir próximas salas de cine de este tipo en Bilbao, Palma de Mallorca o Zaragoza es muy alentador. Estas medidas, por ahora insuficientes, igualan por lo menos en un ámbito discapacitados y no discapacitados.

Elena y Ana G.
 











1 comentario:

  1. Excelente acto esto del cine para sordos y ciegos.
    Esto será un gran avance para la sociedad, ya que es un paso más para integrar a aquellas personas que padecen estas deficiencias.

    Son muchas las medidas que se han llevado a cabo ( semáforos para ciegos, escuelas...) para hacer que estas personas, se sientan lo más agusto posible y puedan sentir que son como el resto de los demás, con sus pros y sus contras, pero que podrán asistir a ver sus películas acompañados de sus amigos y familiares.

    Pienso además, que estas personas son dignas de admiración, ya que a pesar de sus deficiencias, tratan de hacer su vida cotidiana lo más normal posible, y creo que eso solo se consigue con fuerza y coraje.

    Rocío Giles Mancilla

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