Belén Langdon no ha podido sobrevivir a las heridas que sufrió durante la fiesta de Halloween; su hermano, sacerdote, dijo ayer en la cadena Cope que no había «esperanza por su vida».
Belen Langdon es la cuarta víctima de la tragedia sucedida en la noche del miércoles 31, las otras tres murieron aplastadas en la estampida humana que se produjo en uno de los pasillos del pabellón, supuestamente tras el lanzamiento de una bengala.
Según el vídeo, el ayuntamiento de Madrid asegura que no volverá a alquilar ninguna instalación municipal para macro fiestas. ¿Creéis que van a cumplirlo? ¿Es la mejor medida para solucionar este tipo de problema?
¿Pensáis, tal y como dice Elena Valenciano (vicesecretaria general del PSOE), que la solución no es no ceder o no alquilar locales del ayuntamiento sino ejercer los controles oportunos para que no sucedan este tipo de cosas?
La verdad es que esta noticia nos ha impactado a todos y en mi opinión pienso que todos los jóvenes hemos podido reflexionar sobre el tema de las macro fiestas y demás eventos.
En conclusión, ¿Creéis que volverán a ocurrir este tipo de tragedias?
Mercedes Redondo Alonso 2ºA
Yo estuve apunto de ir a esa fiesta pero se agotaron las entradas un mes antes, de todas formas amigos míos fueron y lo que pasó fue que en una sala que tenía un de aforo de 10.000 personas hubo 15.000 entradas vendidas. La culpa es de los organizadores del evento que viendo el dinero que estaban ganando con la sobre-venta de entradas pasaron del aforo limitado y aquello se llenó demasiado de gente. Añadiéndole a eso que algún demente tiró una bengala en esa sala con 15.000 personas, ocurrió la tragedia.
ResponderEliminarLa solución no creo que sea la de prohibir las macro fiestas en ningún local, sino ejercer los controles oportunos como dice Elena Valenciano y si una sala tiene un aforo limitado, respetarlo.
La culpa la tienen los organizadores de la fiesta ya que sobrepasaron el límite permitido del aforo máximo metiendo a 5.000 personas más. Parte de esta culpa también va para los porteros de la discoteca y los vigilantes porque a partir de una determinada hora no pedían entrada y podía entrar quién quisiese por lo que una de esas personas "intrusas" pudo encender la bengala dentro del local que era una de las prohibiciones de la fiesta.
ResponderEliminarLa solución ante este problema es poner más vigilantes y respetar el aforo de la sala y que no se "suban arriba" vendiendo más entradas para conseguir más dinero porque nunca se sabe lo que puede llegar a pasar.
Está claro que esta trágica noticia ha llevado a cabo una búsqueda de culpables. Porque tiene que haberlos, y los hay: los organizadores. Cegados por el dinero, vendieron más entradas de la cuenta, y dispusieron de mínimos sistemas de seguridad, como he podido saber de varios informes realizados por diversos medios de comunicación.
ResponderEliminarYo pienso que la solución sería tomar mayores medidas de control de cara a eventos futuros, no censurarlos definitivamente. ¿Que se gana menos dinero? Sí, pero, ¿y qué?¿Cree la gente que a estos organizadores les ha salido rentable este acontecimiento? Ahora tendrán que pagar su irresponsabilidad, y no creo que vuelvan a organizar muchos eventos. Solo hace falta un poco de control.
Detrás de esta noticia , como de todas las de este tipo de escándalos y en los que interviene una institución pública, como es un ayuntamiento, hay una esquina negra algo raro , entre la relación entre el ayuntamiento de Madrid y los organizadores de la fiesta , cuyas ultimas noticias , dicen al parecer que no era del todo legar como se alquilo y se organizo , y mucho menos ya sin nombrar el aforo.
ResponderEliminarOtras fuentes , como son adolescentes que acudieron a la macro fiesta , han hablado a través de las redes sociales , aseguran que no hubo ningún tipo de control , que se podía entrar sin dni , que no registraban , es decir , seguridad ninguna , otros afirman que el caso de estas chicas no es el único que hay , que hubo un joven apuñalado , pero que los medios no lo sacan a la luz , y otros asombrados aseguran , apenas haberse enterado de nada estando allí , si no al día siguiente por la mañana...
Las medidas que se deben tomar están claras , no hay que cerrar fiestas , ni prohibirlas , pero si CONTROLARLAS de forma LEGAL y segura ,y si se necesita una restauración del pabellón debido a sus estrechos pasillos , se hace y no se renuncia diciendo que habría que tirar gran parte de la fachada y que claro...
¿Son realmente conscientes los culpables de esto de la repercusión que va a tener? ¿ Seguirán saltándose medidas de seguridad tan básicas , para aligerar ?
En mi opinión esto es un domino :si cae uno ,caen todos , y una vez queda demostrado que el ser humado se guía por un olfato que le lleva a lo facil y economico , y no a lo seguro y "logico"...Espero que esto sirva de escarmiento de una vez por todas
Es cierto que la solución sea mejorar la forma de organizar los eventos, tomar más medidas de control y de seguridad, etc. Para mí y para todos los que han comentado lo vemos desde un punto de vista sencillo, tan simple como que para un número x de aforo máximo, se vendan ese mismo número x de entradas. Pero siempre pasa lo mismo, siempre el mismo problema, el dinero. Esa ambición, esa obsesión por querer más y más hasta tal punto de saltarnos todo tipo de normas y todo tipo de reglas sin pensar en las consecuencias que pueden ocurrir, como en este caso ha ocurrido en la tragedia del Madrid Arena. Los organizadores al ver que no paraban de conseguir dinero con este evento quisieron vender más y más hasta que la situación se les fue de las manos y ocurrió lo que ocurrió.
ResponderEliminarHay que acabar con esto YA. Hay que tomar medidas, poner un control mucho más estricto y más riguroso porque lo que ha ocurrido en esta fiesta no tiene nombre y han salido perjudicadas personas que nunca debieron salir perjudicadas. No digo, ni mucho menos, acabar con este tipo de eventos porque de ellos depende la diversión de muchos jóvenes, pero como dicen mis compañeros, hay que tomar medidas de control más oportunas y mejor organizadas.